¿Qué son los megalitos?
Los megalitos, del griego μέγασ; megas (grande) y λίθοσ; lithos (piedra), son construcciones caracterizadas por el uso de enormes piedras escasamente desbastadas.
Los elementos constructivos no se colocaban formando hiladas; como las construcciones ciclópeas sino que se utilizaban grandes bloques alargados que se disponían en posición vertical.
En el caso de los dólmenes (grandes tumbas monumentales) empleaban grandes losas verticales para hacer las paredes; y el techo se construía normalmente con una única losa horizontal.
¿Qué es el megalitismo?
El rasgo cultural caracterizado por la construcción de estas estructuras se denomina megalitismo.
El megalitismo se desarrolló en Europa Occidental y el Magreb durante el neolítico y el calcolítico, pero también a otras partes del mundo, como África subsahariana, Asia o Oceanía, en otros momentos de la historia y de forma independiente.
Tipo de megalitos
Los tipos de megalitos básicos son el menhir y el dolmen, pero su agrupamiento, la combinación de ambos o una mayor complejidad, dan lugar a una tipología más variada en la que encontramos alineamientos (como el de Carnac, en Francia), cromlecs ( como el Stonehenge, en Inglaterra) y dólmenes de corredor y cámara.
Menhir
La palabra menhir procede del bretón, idioma en el que significa “piedra larga” (de men o maen = piedra y hir = larga).
Se trata de un único monolito insertado en el suelo verticalmente y su uso es por lo general funerario, sin embargo puede tener otras funciones.
A veces se presentan agrupados en hileras, dando lugar a un alineamiento como el de Carnac, también pueden presentarse formando círculos constituyendo entonces un crómlech, los ejemplos más sofisticados son los henges de Inglaterra.
Dolmen
Una de las variedades de megalitos es el dolmen, término proviene del bretón y significa «mesa de piedra» (de duelo = mesa y men = piedra).
El dolmen se compone por dos o más ortostatos en los cuales se apoya una losa que se coloca de forma horizontal.
Uno de los tipos de dolmenes más complejo de esta última clase es el dolmen de corredor y cámara; que eran los megalitos que constaban de un pasillo o galería que conduce hasta una o dos cámaras.
Tanto el pasillo como la cámara pueden presentar un plano regular o irregular; los de pasillo regular llevan a una cámara también regular; y bien diferenciada; de forma circular o cuadrada; que también puede estar cubierta no por megalitos sino por una falsa bóveda; como pasa a Los Millares (Almería).
A veces aparece una cámara secundaria y más pequeña situada en el mismo eje longitudinal de la edificación y comunicada con la principal mediante otro corto pasillo.
Aquellos que poseen planta irregular no existe separación definida entre pasillo y cámara; hay un mero ensanchamiento del pasillo; sin embargo a diferencia de los de forma regular; su cubierta es con dintel y está constituida por losas muy grandes.
En todos los casos este tipo de construcciones estuvieron recubiertos por un túmulo de tierra de varios metros de diámetro; como colinas artificiales, que les dan aspecto de cueva; por lo que, a veces y popularmente, se les denomina “cuevas”.
Proceso de construcción de un megalito
El proceso de construcción de megalitos comienza en una cantera de donde se extraían los grandes bloques de piedra.
Para romper la piedra se sometía a bruscos cambios de temperatura. Insertaban en la piedra cuñas de madera impregnados de grasa y se hacían quemar.
A continuación se añadía agua fría y se apagaba el fuego. La extracción final se realizaba con cuñas y mazas.
El transporte podía ser muy dificultoso porque las canteras podían estar muy alejadas del lugar donde se iba a levantar el megalito.
El proceso de transporte se efectuaba con la fuerza humana, ayudándose de rodillos de madera y cuerdas vegetales.
Una vez habían llevado los monolitos hasta el lugar elegido, se cavaba un hoyo para poner el bloque verticalmente con la ayuda de cuerdas, luego se llenaba el agujero de tierra o piedras pequeñas para fijarlo firmemente.
Si se construía un menhir, el proceso estaba terminado, pero para hacer un dolmen tenía que hacer un terraplén a ambos lados de los bloques verticales para poder transportar el bloque horizontal y colocarlo correctamente en lo alto.
Después se cubría de tierra que, sumada a la de los terraplenes, daba lugar al túmulo.
Esta hipotesis ha sido corroborada en multiples ocasiones por diversos equipos de investigacion, incluyendo el de J.P. Mohen, quien en el año 1979 levanto un Dolmen con la ayuda de 200 personas.
Estudios llevados a cabo en inglaterra demostraron que la fase final del Stonehenge consumio 3 millones de horas de trabajo; mientras que para el gran tumulo de Silbury Hills fueron necesarios al menos 2 años de trabajo.
Por su parte, los henges menores de la region de Wessex involucro a 300 trabajadores durante todo un año.
Ahora ya sabes que es un megalito. Es asombroso ¿no te parece?